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La telemedicina representa hoy una de las áreas más promisorias y de mayor desarrollo potencial en el vasto campo de las ciencias de la salud, al tiempo que es de las que registra una de las mayores cantidades de recursos de información en el World Wide Web.
En la actualidad el aporte de la tecnología es fundamental en todas las áreas que se desarrollan en el mundo, tanto en la empresa e industria como en la educación y la cultura. Pero es imprescindible tener en cuenta uno de los campos en que la tecnología ha contribuido generosamente y donde se espera que los avances sean aun mayores; la medicina. Por su puesto es necesario que exista una relación entre medicina y tecnología ya que el manejo de los equipos médicos de alta complejidad es parte de los avances tecnológicos que se han venido efectuando a través del tiempo.
Según Daniel Jaramillo, Medico especialista en cardiología del Hospital Universitario San Vicente de Paúl: “Hay que hacer una especial diferencia cuando se habla de tecnologías al servicio de la medicina; en primer lugar están las de diagnóstico que permiten identificar y determinar los procesos patológicos por los que pasa un paciente, luego las preventivas, que protegen al individuo contra la enfermedad, están también las tecnologías de terapia o rehabilitación, que liberan al paciente de su enfermedad o corrigen sus afectos sobre las funciones del paciente y finalmente podríamos incluir un cuarto grupo que sería las tecnologías de administración y organización, que permiten mejorar el funcionamiento correcto y oportuno de los servicios de salud”.
El progreso en cuanto a estudio de los seres vivos y los avances en la manipulación genética han hecho posible la comprensión de numerosos problemas, así como el planteamiento de soluciones útiles para la salud humana. Ejemplo de ello es la telemedicina, concepto que puede definirse como la utilización de señales electrónicas para transferir e intercambiar información médica de un lugar a otro, en forma remota y en tiempo real a través de redes de comunicación.
La tecnología para desempeñar la telemedicina puede ir desde el uso de la simple red telefónica hasta los enlaces satelitales, pasando por el intercambio de señales de video y las tele-conferencias remotas para trabajo en grupos, entre muchas otras posibilidades y aplicaciones. Una de las herramientas que más favorece este nuevo concepto es Internet II, que es un proyecto adelantado por más de 200 universidades implicadas en el desarrollo de las telecomunicaciones del futuro. Así, Un médico puede operar a distancia, mientras un robot esclavo reproduce fielmente sus movimientos, gracias al ancho de banda de Internet II, el médico puede tener una realimentación sensorial y visual en tiempo real de la cirugía que realiza.
En los últimos años, la Telemedicina está adquiriendo un valor singular. Su uso ha permitido que delicadas intervenciones médico-quirúrgicas hayan podido ser dirigidas por especialistas desde puntos tan alejados como Alemania ó Estados Unidos con resultados plenamente satisfactorios.
De acuerdo al Dr. Daniel Jaramillo, en Colombia aun falta un basto camino para ponernos a la par con otros países de alto desarrollo en cuanto a tecnologías a disposición de la medicina como lo son Alemania y Estados unidos, sin embargo hay que reconocer que algunos centros de salud como el hospital San Vicente de Paúl han adquirido reconocimiento en cuanto a intervenciones quirúrgicas se refiere, posibilitando de esta manera que sea más sencillo acceder a dichas tecnologías, máxime cuando se tiene el apoyo de una universidad pionera en investigación; la Universidad de Antioquia.
Sin embargo hay que tener en cuenta cuatro factores especiales que sin duda vienen de la mano de los avances tecnológicos.
- En primer lugar las discrepancias éticas y morales sobre ciertas practicas como la manipulación genética y la clonación.
- En segundo lugar el deterioro de las relaciones entre pacientes y médicos que son menos directas debido a la intervención de aparatos eléctricos.
- En un tercer lugar se encuentran los costos y la dificultad para acceder a los servicios, pues nueva tecnología demanda nuevos costos.
- Finalmente existe el temor, en especial por parte de los médicos de que toda su capacidad humana y su preparación profesional sea remplazada por maquinas capacitadas para asumir decisiones.
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